Nacido en Estancia Nueva, Moca, en el año 1886, Juan Rodríguez García, conocido popularmente como Juancito Rodríguez, fue el hacendado más grande de la República Dominicana durante las primeras décadas del siglo 20.
Era propietario de fincas ganaderas, de cacao y plátanos en Constanza, Barranca, Rancho Viejo, Los Guayos, Jima Arriba, Jima Abajo, Tamarindo y Las Canas…
En su juventud, junto a su hermano Doroteo, participó en la política en el bando de Horacio Vásquez. En 1930, tras el golpe de Estado al gobierno horacista y el asalto al poder por Rafael Leónidas Trujillo Molina, Juancito aceptó la postulación como senador del partido del dictador en ciernes, quien para entonces había comenzado a erigirse en dueño y señor del país...
Trujillo, motivado por la ambición de adueñarse de las propiedades más importantes del país, puso sus ojos en las riquezas de Juancito, lo que generó una malquerencia entre ambos…
En el segundo período presidencial de Trujillo, Juancito no logró esconder sus desavenencias y ausencias en las sesiones de la Cámara legislativa, situación que se agravó en 1935, cuando el legislador se negó a firmar la condena del entonces diputado Miguel Ángel Roca.
A raíz de esta conducta disidente fue marginado de su cargo y sometido a vigilancia… Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, Juancito tomó la decisión de luchar activamente contra el régimen trujillista. Al no conseguir apoyo dentro del país en su lucha contra el régimen de Trujillo, y alegando problemas de salud, Juancito fue autorizado a viajar a Puerto Rico, en enero de 1946, donde hizo contacto con núcleos del exilio dominicano.
Con igual propósito viajó a Nueva York y luego a Cuba, donde se radicó, no sin antes haber tomado medidas económicas que le permitieran acumular grandes sumas de dinero en el extranjero, para viabilizar sus planes…
En mayo de 1946, el tirano dispuso una campaña represiva contra los familiares de Juancito Rodríguez que se encontraban aún en el país, encarcelando a su esposa, nuera e hija, al tiempo que abusivamente disponía el pillaje de sus tierras y ganados…
Mientras tanto, Juancito se encontraba en Cuba, en medio de los aprestos organizativos de la proyectada expedición de Cayo Confites de 1947.
Dos años después, en Guatemala y con el apoyo del gobierno de Juan José Arévalo, dirigió la expedición que aterrizó en Luperón, el 19 de junio de 1949. Ambas expediciones fracasaron, pero la lucha de la familia continuó, y José Horacio Rodríguez Vásquez, hijo de Juancito, vino al país por Luperón en 1949 y posteriormente como comandante del grupo que vino por Maimón.
Fue muerte al desembarcar el 20 de junio de 1959, seis días después que otro grupo aterrizara en Constanza… A propósito, cabe destacar que José Horacio Rodríguez Vásquez había dejado a un lado su renombrado nivel profesional (era un abogado con estudios de economía en la Universidad de Harvard) para enrolarse en el proyecto de la liberación dominicana, participando con su padre en Cayo Confites, en Luperón y, finalmente, llegando a ser comandante de las expediciones marítimas de junio de 1959…
El fracaso de las tres expediciones en las que había participado (Cayo Confites, Luperón y 14 junio de 1959), la ejecución de su hijo José Horacio Rodríguez Vásquez y la pérdida de toda su fortuna sumieron en la depresión a Juancito Rodríguez, quien se suicidó en Barquisimeto, Venezuela, el 19 de noviembre del 1960, tras 14 años de exilio y seis meses antes del ajusticiamiento de Trujillo…
En 1978, el entonces presidente Antonio Guzmán Fernández gestionó la traída de los restos de Juancito desde Venezuela, siendo enterrados en Moca.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario